EL SOCAVÓN DE MORENA

La derrota sufrida por Morena en la capital de la República es descomunal no solo en términos cuantitativos, sino cualitativos

La derrota sufrida por Morena en la Ciudad de México es histórica, porque puso fin a 24 años de dominio total de la izquierda en esta entidad, que a partir de las elecciones del pasado lunes, quedó políticamente divida en dos grandes bloques.

En las elecciones de 1997, el PRD ganó la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal con Cuauhtémoc Cárdenas como candidato. Ganó también las 40 diputaciones locales que había en esa época y 27 de las 30 federales.

A partir de entonces el PRD borró al PRI del mapa político de la capital de la República y nunca más volvió a compartir el poder, pues elección tras elección el PAN ganaba eventualmente solo algunas diputaciones y algunas delegaciones.

Actualmente Morena gobierna 14 de las 16 alcaldías. Pero a partir de que  tomen posesión quienes ganaron las elecciones, Morena solo gobernará en siete, mientras que la oposición gobernará nueve, la mayor parte de ellas el PAN.

La derrota sufrida por Morena en la capital de la República es descomunal no solo en términos cuantitativos, como ya lo vimos, sino cualitativos, pues se trata nada menos que del mayor centro de población del país y el principal bastión político que tenía el partido en el poder.

Entre las alcaldías perdidas está la de Tlalpan, lo que representa un mensaje de rechazo y reprobación hacia Sheinbaum de quienes fueron sus gobernados.

Pero Morena también perdió la joya de la corona, es decir, la alcaldía Cuauhtémoc, el corazón de la ciudad, asiento de los poderes locales y de los poderes Ejecutivo y Legislativo a nivel federal.

Es pertinente aclarar que esta alcaldía la perdió Morena pero la ganó Morena.  Para ser más precisos, la perdió Claudia Sheinbaum, a través de su candidata, Dolores Padierna, y la ganó Ricardo Monreal, a través de su alfil, Sandra Cuevas. 

Morena recibió voto de castigo en varias alcaldías que gobernaba y en donde sus titulares buscaban su reelección, como en Miguel Hidalgo, en la cual Víctor Hugo Romo perdió estrepitosamente contra el panista Mauricio Tabe.

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Lo mismo ocurrió en Azcapotzalco, en donde el alcalde Morena, Vidal Llerenas –hombre muy cercano a Marcelo Ebrard—  se quedó con las ganas de ser reelegido, pues ganó los comicios la panista Margarita Saldaña.

La caída que sufrió Morena también se reflejará en la composición del Congreso local, en donde el partido en el poder dejará de tener el control total que mantuvo durante 23 años, a través del PRD.

De acuerdo con el avance del 98.37 por ciento del PREP, la coalición Morena-PT ganaría solo 18 de 33 diputaciones locales de mayoría que están en disputa, mientras que el resto quedaría en manos de la oposición. Y de esas 18, habría que ver cuántas serán para Morena y cuántas para el PT.

La caída de Morena en la capital significa un golpe severo tanto para el presidente Andrés Manuel López Obrador, como para Claudia Sheinbaum. Sin embargo, en lugar de asumir con decoro su derrota, ambos escurren el bulto y le echan la culpa a la “guerra sucia” y a las “campañas de desprestigio”, según dijeron uno y otra.

Pero bueno, eso lo dicen en público, porque en privado ambos deben estar muy preocupados. Sobre todo Sheinbaum, quien seguramente estará pensando que la obediencia ciega no la ha llevado a nada bueno.

OFF THE RECORD

**LEY ZALDÍVAR

No se habían terminado de cerrar las casillas, cuando la Secretaría de Gobernación ya tenía lista la orden para que fueran publicadas las reformas que permiten la ampliación del mandato del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.

Imposible no dejar de mencionar que el día de las elecciones alguien le gritó a Zaldívar  ¡respeta la Constitución!

Pero el ministro ni vio ni escuchó a su impugnador.

**LAYDA VELA ARMAS

La candidata de Morena al gobierno de Campeche, Layda Sansores, se prepara para hacer estallar un conflicto postelectoral en caso de que los tribunales no le den el triunfo.

La elección está cerrada y se irá a tiempos extras.

Si Layda no gana en la mesa ya todo mundo sabe lo que hará.

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