El secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, junto con la secretaria de Trabajo, María Luis Alcalde, anunciaron un incremento salarial entre uno y tres por ciento para servidores públicos que generen menos de 200 mil pesos anuales netos.
Es decir, los servidores públicos que reciban un salario neto anual de hasta 100 mil pesos tendrán un aumento salarial del tres por ciento extra.
Y los que perciben entre 100 mil y hasta 150 mil pesos, su aumento será de 2 por ciento y los que reciben de 150 mil hasta 200 mil pesos, tendrán un alza de uno por ciento.
Según Urzúa este incremento no tendrá ningún impacto para el gasto público, dado que ya estaba contemplado en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2019.
“Es un estimado de 3 mil 500 mdp que ya estaban contemplados en el presupuesto; no es algo extra que no podamos o no esté previsto, era una especie de guardadito que ya teníamos”.
Ojalá así el Gobierno tuviera sus guardaditos para solucionar los problemas en otros sectores, como en Salud, donde varios pacientes y enfermos están padeciendo por falta de medicamentos. Así como varias mentes brillantes andan pidiendo dinero hasta en la calle porque el gobierno no los apoya con sus estudios.
