Luego de dos alcaldes asesinados semanas atrás— y alrededor de 50 de todos los partidos políticos en una década, principalmente a manos del crimen organizado—, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) y presidentes municipales por fin acordaron trabajar coordinadamente para mejorar la seguridad.
Renato Sales Heredia, comisionado nacional de Seguridad y los integrantes de la Conferencia Nacional de Municipios de México (Conamm) acordaron mesas de trabajo para analizar la problemática, además de trabajar en “el fortalecimiento institucional” para tener autoridades confiables, capacitadas y certificadas.
Si bien la mayoría de los presidentes municipales ha muerto a manos del crimen organizado, el reciente asesinato del alcalde de San Juan Chamula, en Chiapas, Domingo López González, se dio en medio de un contexto económico, político, religioso y familiar.
Pero no es el único caso de agresiones en contra de presidentes municipales que no se da por el crimen organizado. Hace unos días, pobladores de Mártir de Cuilapan (Apango), Guerrero, incendiaron la camioneta de la alcaldesa, Felícitas Muñiz Gómez porque “el Congreso no ha resuelto el juicio político” en contra de la alcaldesa.
De acuerdo con el portal Bajo Palabra, los habitantes llegaron a la cabecera municipal, tomaron el vehículo de la alcaldesa y le prendieron fuego. Pero anteriormente, los pobladores ya habían saqueado cuatro propiedades de la alcaldesa.
Pero además se hablan de actos machistas y revanchas políticas de caciques y exalcaldes que piden “derecho de piso”.
Y es que según los pobladores, ni al gobierno estatal ni al Congreso guerrerense le interesa lo que pasa en Apango, donde dicen, hay ingobernabilidad.
Ahora con esta “defensa” de presidentes municipales ¿Alguien sabe que las agresiones no solo vienen del crimen organizado? ¿Tienen alguna estrategia para proteger a los alcaldes de los mismos pobladores? ¿Qué van a hacer en casos como San Juan Chamula y Apango? ¿Van a esperar otro alcalde muerto, ahora a manos de los pobladores?
