Esta mañana el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, informó que solicitará al gobierno federal una auditoría para analizar la información entregada por todos los estados. Esta medida sería consecuencia de la denuncia que interpuso Alfaro para la administración anterior liderada por el priísta Aristóteles Sandoval.
En esta denuncia, el actual gobernador acusa a Sandoval de “maquillar” las cifras que el Secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) presentaba sobre los delitos en el estado.
Asimismo, afirmó que el secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, ya tiene conocimiento sobre este problema por lo que creyó prudente sugerir iniciar una profunda investigación para todos los estados.
“Alfonso Durazo me dijo que sí iba a generar ruido, pero era oportuno. Si esto pasaba en Jalisco, no dudo que ocurriera en otros lados y si otros gobernadores quieren mentir, allá ellos, pero que los auditen”, sentenció Alfaro.
Comunicó, además, que en una investigación interna pudo detectar que en 2017 sólo se registró el 71% de los delitos ocurridos en el estado y en 2018 solamente el 73%. Nada en comparación con el 39% informado en 2016, lo cual genera sospechas sobre la omisión de innumerables datos.
Entre las infracciones no reportadas se encuentran robo de vehículos, robo a negocio, a casa-habitación y robo a transeúntes.
