AMLO otorga amnistía “a todos”; ¿adiós a la mafia del poder?

El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador reiteró que no se perseguirá a nadie en su administración, pues su “fuerte no es la venganza”.

No vamos a perseguir a nadie. No es mi fuerte la venganza. No vamos a la política de siempre de, por razones de espectacularidad, meter a la cárcel a algún famoso de la política o el sector empresarial o del mundo, incluso del espectáculo. Nada de eso. No necesitamos eso, pero, desde luego, hay procesos en curso”, dijo.

Es decir, la amnistía que propone el tabasqueño llega a los ámbitos políticos, empresariales y hasta del espectáculo. ¿Se acabó la “mafia del poder”?

En su larga carrera por la presidencia de la República, AMLO inventó a la “mafia del poder”, sumando poco a poco a personajes que según el tabasqueño, querían impedir que él y su movimiento llegaran a encabezar la administración federal.

Según López Obrador, el “régimen” de lo que llama la “mafia del poder” se inició con el expresidente Miguel de la Madrid (1982-1988), pero de acuerdo con su versión se profundizó en la Presidencia de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) cuando se vendieron empresas estatales a empresarios supuestamente cercanos al presidente.

El tabasqueño considera que los expresidentes Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón continuaron beneficiando al mismo grupo. En la presentación de uno de sus libros mencionó algunos nombres, cuando dijo: “Carlos Slim, Ricardo Salinas Pliego, Germán Larrea, Alberto Baillères, Jerónimo Arango, Emilio Azcárraga, Carlos Peralta, entre otros potentados, además de políticos como Diego Fernández de Cevallos, Enrique Peña Nieto, Manlio Fabio Beltrones y Elba Esther Gordillo, y tecnócratas como Francisco Gil, Guillermo Ortiz y Pedro Aspe“.

En más de 18 años, Andrés Manuel acusó a más de 30 personajes sin prueba alguna. Muchos de ellos se fueron integrando a su movimiento y, así como creó la “mafia del poder”, así también la desapareció, pues “todo está perdonado”.

El presidente López, ahora ya anunció que todos, empresarios, políticos, famosos y prácticamente quien quiera y el “todopoderoso” decida, podrán actuar con absoluta libertad, sin importar sus graves acusaciones, las cuales en caso de ser ciertas, quedarían en la impunidad.

En su intento desesperado de llegar a la presidencia, AMLO prometió perdón y olvido, una República amorosa y moral y un claro combate a la impunidad y a la corrupción. ¿Qué pensarán ahora sus seguidores, quienes castigaron con su voto a la clase política?

Lo cierto es que, siendo o no seguidores de Andrés Manuel, la ciudadanía espera un gobierno que respete y aplique la ley y no ande de “cuentacuentos” con promesas vagas que cambian de un día para otro.