CCE revive su lucha contra el populismo; enfrenta al “nuevo Echeverría”

A casi 42 años de su fundación, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) vuelve a sus raíces.

En 1976 los empresarios vivían asediados por el gobierno populista de Luis Echeverría Álvarez, que trató de intervenir en la política económica y productiva del país con medidas proteccionistas que desencadenaron la devaluación de aquel año. En respuesta, surgió el CCE.

En el gobierno de Echeverría (1970-1976), los encontronazos con los empresarios eran el pan de cada día. El presidente los llamaba “empresarios riquillos”, enemigos del país y de la revolución. El punto más crítico fue en 1973 con el asesinato del empresario Eugenio Garza Sada, a manos de guerrilleros. El gobierno sabía de la acción y fue cómplice por omisión, según consta el expediente desclasificado 11-219-972 de la extinta Dirección Federal de Seguridad (DFS).

Con este antecedente se publicó una  “Declaración de principios”, la cual buscaba aglutinar a la mayoría de los empresarios, mediante la creación de una figura jurídica de “Consejo” de integrantes de las cúpulas empresariales.

Ahora a más de cuatro décadas de su creación, además de las políticas comerciales agresivas de Donald Trump en Estados Unidos, el CCE se enfrenta a un enemigo interno en Andrés Manuel López Obrador, quien llama a los empresarios “pirrurris”. El aspirante presidencial promete derogar las reformas educativa y energética, además de frenar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).

En este último, AMLO quiere terminar con los contratos adjudicados y no menciona lo que hará con lo invertido, ha propuesto una mesa de diálogo entre el CCE y su movimiento, para convencer a los empresarios de desistir de la construcción en Texcoco y trasladarlo a la Base Militar de Santa Lucía, dando un golpe al sector empresarial que ya invirtió y de paso a despojando a las Fuerzas Armadas de una base importante para la defensa de la soberanía nacional.

Este enfrentamiento entre el candidato de la izquierda y el CCE, nos remonta al pasado, precisamente al sexenio de Echeverría Álvarez, donde se pretendía una intervención del gobierno en la política económica. Ahora AMLO quiere doblegar a los “pirrurris” como lo intentó en su momento el ex presidente, con medidas fiscales proteccionistas e intimidación al sector empresarial.

Los empresarios se ven unidos nuevamente ante AMLO un enemigo similar a Luis Echeverría. A más de cuarenta años de su fundación el CCE, que enfrentó el terror del “arriba y adelante”, ahora se enfrenta  al terror del “juntos haremos historia”: AMLO, el nuevo Echeverría.