Contingencia; todos responsables

Hace horas, los gobiernos de la ciudad de México y del estado de México anunciaron el final de la contingencia ambiental.

Sin embargo, el problema no está resuelto.

Dicen los enterados que la contingencia podría regresar en cualquier momento. De hecho, hay quienes aseguran que incidentes como éste podrían convertirse en parte del cotidiano si seguimos como hasta ahora. ¿Por qué?

Porque el problema de fondo persiste.

En entrevista para La Otra Opinión, el Doctor Carlos Caballero, Director de la Carrera de Desarrollo Sustentable del Tec de Monterrey Campus Ciudad de México, explicó que la contingencia es el resultado del descuido, de las malas prácticas y de las violaciones de todos.

Es decir, que atrás de la contingencia estarían la industria, el transporte, los 24 millones de personas que viven en el Valle de México, los políticos que obstruyen en vez de sumar, los tres órdenes y los tres niveles de gobierno y todos los que no terminan de entender que el problema ambiental de la Ciudad es histórico, que no existen soluciones instantáneas y no asumen la responsabilidad que les corresponde.

Es así que, durante años, las autoridades y los ciudadanos se han conformado con paliativos que no resuelven el problema ambiental ni en el corto ni el mediano plazo. Y es que, como explicó el Doctor Caballero, en cuestiones de sustentabilidad, los plazos se extienden por 25 ó 50 años. En otras palabras, que ninguna autoridad ha tenido la visión para diseñar e implementar políticas que sean efectivas durante esa cantidad de años.

Tal parece que los políticos empujan respuestas temporales, soluciones aparentes que no implican costos elevados de imagen y que no comprometes sus alianzas con otros cotos de poder.

¿Y quiénes son los principales afectados por esta escasez de miras?

En efecto, los más vulnerables: niños, ancianos y enfermos.

Por eso, si existe la intención de evitar que fenómenos como éste se repitan, la única ruta es asumir la responsabilidad que corresponde a todos. De lo contrario, como ya se dijo, las contingencias se convertirán en parte del paisaje urbano.