A más de 11 meses de haber iniciado la administración de Andrés Manuel López Obrador, tres casos han exhibido la grave crisis de comunicación que padece al gobierno federal: El avionazo de Puebla, la explosión de un ducto en Tlahuelilpan y operativo fallido en Culiacán.
Justo en este último suceso se enfoca el analista y consultor político, Fernando Dworak, en su artículo para Infobae titulado: “Culiacán: ¿La gran crisis de comunicación de López Obrador?”, 08/11/19, mismo en el que analiza para qué sirve contar con un buen manejo de crisis de comunicación.
En ese sentido, Dworak sostiene que contar con un buena estrategia de comunicación ayuda a preservar la credibilidad de una institución u organización. Sin embargo, en la “Cuarta Transformación” eso no sucede, pues todo se respalda en la popularidad que mantiene López Obrador.
Por otro lado, el consultar plantea dos hipótesis que pudieron haber provocado las falencias en las comunicación institucional mexicana:
“La primera: siguen sin tener idea de la importancia de planear hasta la comunicación política en momentos como éste, confiados en la popularidad de López Obrador. La incapacidad para generar certeza a dos semanas implica que es tiempo de replantear estrategias de comunicación política, de ser éste el caso.
“La segunda: desde diciembre desaparecieron las áreas de prensa de las secretarías de Estado, concentrándose esta función en la Oficina de la Presidencia de la República. Esto dificultaría toda coordinación entre agencias, así como el flujo de información en momentos de crisis, haciendo que todo dependa de lo que diga el ejecutivo en sus conferencias “mañaneras”. Abona a esta hipótesis la opacidad que hay en la operación de esta área”, aseveró el Dworak.
Con la explicación de Fernando Dworak queda claro que el gobierno obradorista solo ha disimulado a la hora de informar sobre sucesos de interés nacional, pero esto puede puede dar paso a graves crisis sociales.
Con información de Infobae.
