Después de que el conteo rápido oficial de las elecciones presidenciales de Bolivia, prácticamente, le está dando la victoria a Evo Morales, las protestas sociales no se hicieron esperar en el país sudamericano.
Tal ha sido la controversia que levantó dicho recuento de los votos, que los ciudadanos bolivianos no creen que Morales sea el vencedor sin ir a una segunda vuelta; sobre todo, porque al principio esa era la tendencia era esa.
Pues ahora resulta que actual mandatario –con el 95.63 por ciento de las actas verificadas– tiene un porcentaje a su favor arriba del 40 por ciento de los votos y una diferencia de más de 10 puntos sobre su contrincante Carlos Mesa.
En consecuencia, miles de inconformes salieron a las calles en La Paz y Santa Cruz, lugares donde convocaron un paro y se instalaron bloqueos; aunque situaciones similares se presentaron en Cochabamba, Potosí y Sucre.
Tumban estatua de Hugo Chávez
Pero las marchas no fue lo único que llamó la atención, ya que opositores al gobierno de Evo Morales derribaron la estatua del fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez –que se colocó en 2013–, en la ciudad de Riberalta, en la Amazonía boliviana.
Cabe señalar que esta reacción se dio después de que se anunciaron los resultados preliminares que apuntaban a Morales como virtual ganador en la primera vuelta.
Con información de RT y El País.
