Desplazados de Cosalá regresan a casa

Durante días se habló de las centenas de personas que, supuestamente, huyeron de la sierra de Durango por temor al Ejército.

Durante días se dijo que 250 familias se habrían refugiado en el municipio de Cosalá –en Sinaloa–, luego de las agresiones del Ejército y de los Marinos.

Y durante días –prácticamente desde que el Estado entró a la zona del “Triángulo Dorado” para recapturar al Chapo Guzmán–, creció la especie de que los soldados y marinos desplazaron a decenas de familia en el noreste del país.

Sin embargo, el reportero José Arnold –enviado de La Otra Opinión a Cosalá–, aseguró que un número considerable de estas familias habían abandonado los albergues y ya regresaban a sus lugares de origen.

Es decir, que el fenómeno habría terminado.

Frente al abrupto final de esta “crisis de desplazados”, no está de más preguntar, ¿por qué regresan a sus casas? ¿acaso ya terminó la crisis? ¿se resolvió el problema? ¿qué los hace volver a la serranía de Durango? ¿de qué se enteraron? ¿saben algo que otros no? ¿por qué dejaron sus casas en primer lugar? ¿se fueron por pie propio? ¿los hicieron salir de sus hogares? ¿realmente tienen miedo al Ejército? ¿es cierto que soldados y marinos fueron violentos con los “vecinos” del Chapo? ¿y si se trata de un montaje? ¿y si existe un interés por desprestigiar el trabajo del Estado en el “triángulo dorado”? ¿y si, con presión mediática, el Chapo busca salvar el pellejo? ¿qué lo que realmente en Cosalá? ¿algún día lo sabremos?