Según el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), desde su fundación ha trabajado en la defensa de los animales. En esa lógica, en 2014 presentaron una iniciativa de ley para prohibir el uso de animales en circos.
Sin medir las consecuencias, el PVEM, organizaciones protectoras de animales y amplios sectores de la sociedad civil apoyaron la idea de los verdes.
No obstante, de acuerdo a reportes de la prensa, al poco tiempo de haberse implementado el circo sin animales, el 80 por ciento de las especies están muertas.
En el colmo del absurdo, en lo que parece un intento por consagrarse como los “máximos protectores de animales” del país, los ecologistas dicen que van por cerrar los zoológicos, por clausurar los acuarios, por inhabilitar los delfinarios y por prohibir las tiendas de mascotas. ¿Y cuál es el plan para los animales que habitan en ese espacio? Nadie sabe.
Tras la muerte de mil 289 animales que vivían en circos, el coordinador de los diputados ecologistas, Jesús Sesma, lamentó la pérdida de las especies que no lograron hacer la transición de los circos a algún santuario o zoológico. También condenó a quienes se aprovecharon de esta medida para adquirirlos a bajo costo o que algunos de ellos acabaran en manos de traficantes de especies.
Sin embargo, el legislador del Partido Verde no aceptó que su política mal diseñada, mal planeada y pésimamente implementada prácticamente condenó a muerte a los animales de circo.
En los hechos parece que Sesma se lava las manos y se limita a decir que trabajará de manera conjunta con organizaciones no gubernamentales y expertos para garantizar “la correcta aplicación de propuestas en materia de bienestar animal, de acuerdo con los términos que dicte la ley”.
Pero, ¿dónde están la vergüenza, la responsabilidad, la entereza y la dignidad de los ecologistas? ¿por qué no han pedido perdón por su error atroz? ¿por qué no han salido a reconocer que su proyecto fue una verdadera estupidez que culminó con la muerte de más de un millar de animales? ¿en serio creen los verdes que el trillado discurso de “seguiremos trabajando” basta para remediar el fallecimieto de cientos de animales?
Y eso no es todo…
En este momento, el estado de Chiapas –el único que gobierna el Partido Verde–, vive una crisis política, social y económica. Algunos aseguran que se trata de una disputa con el PRI, otros que es un pleito histórico y otros más sostienen que es un reacomo del crimen organizado; ¿y qué han hecho, dicho o propuesto los Verdes al respecto? ¿dónde están los afiliados a ese partido?
Cabe recordar que en días pasados, el edil de San Juan Chamula –militante del PVEM–, Domingo López, fue asesinado por una turba que pedía recursos para sus comunidades; ¿y cuál fue la reacción del partido luego que uno de los suyos fue asesinado por una turba? En efecto, el silencio.
A todas luces, el Partido Verde hace agua en sus dos frentes más llamativos. Por un lado, su política más “popular” condenó a muerte a cientos de animales de circo. Por el otro lado, el único estado que gobiernan –Chiapas– parece estar de vuelta a los tiempos de turbulencia, ¿y cómo responderá el partido? ¿volverán a pagar tuits para que los famosos hablen maravilla de sus propuestas y de sus políticos? ¿dejarán que la opinión pública voltee la mirada a otro lado? ¿seguirán tomándonos el pelo?
