En el marco de la discusión de las leyes secundarias de la Reforma Educativa, están saliendo a las luz varias irregularidades, que solo tienen como objetivo beneficiar a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Sin embargo, lo que más llama la atención es el famoso “pase automático” para todos aquellos profesores que egresen de la diferentes Normales, ya que es anticonstitucional y, eventualmente, generará condiciones negativas para el aprendizaje de niños y niñas, sin dejar de mencionar que es oportunista.
Dicha propuesta viola la Constitución porque el artículo tercero establece lo siguiente: “La admisión, promoción y reconocimiento del personal que ejerza la función docente, directiva o de supervisión, se realizará a través de procesos de selección a los que concurran los aspirantes en igualdad de condiciones y establecidos en la ley prevista en el párrafo anterior, los cuales serán públicos, transparentes, equitativos e imparciales y considerarán los conocimientos, aptitudes y experiencia necesarios para el aprendizaje y el desarrollo integral de los educandos. Los nombramientos derivados de estos procesos sólo se otorgarán en términos de dicha ley”.
Eso dice la ley, pero en el nuevo Proyecto de Dictamen de la Ley General del Sistema para la Carrera de Maestros y Maestras —que se basa el numeral 3 de la Carta Magna— se intenta añadir, contrario a lo que dicta a la Constitución, un trío de artículos (35,39 y 40) que, simple y llanamente, establecen “preferencia” y “entrega de plazas” con clara inclinación hacia los normalistas, acabando con la igualdad de condiciones, así como la equidad e imparcialidad de las pruebas para la selección de plazas de los profesores.
