Tras la renuncia de Evo Morales como presidente de Bolivia, el Departamento de Estado de los Estados Unidos dio la orden este miércoles para que todo su personal en el país sudamericano, así como sus familias, regresaran a sus hogares.
“El gobierno de Estados Unidos tiene una capacidad limitada para proporcionar servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses en Bolivia”, aclaró la dependencia.
De igual manera, y como ha sucedido en reiteradas ocasiones con otras naciones, las autoridades del país norteamericano alertó a sus connacionales sobre los riesgos de viajar a Bolivia en estos tiempos, principalmente por las protestas violentas que se han registrado en los últimos días.
“Hay manifestaciones, huelgas, bloqueos y marchas recurrentes en las principales ciudades de Bolivia. Los bloqueos de carreteras y las huelgas cortaron el tráfico en las avenidas principales, las autopistas entre ciudades y el acceso al aeropuerto”, informó el Departamento de Estado.
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De igual manera, explicaron que debido al entorno los vuelos nacionales e internacionales han sufrido retrasos y hasta han sido cancelados, situación que en conjunto con el cierre de vías terrestres entorpecerían cualquier viaje.
