Fotomultas mata gobiernos; escucha Juan para que entiendas Mancera

En su columna de Excélsior, el columnista Adrián Rueda recuerda que cuando en San Luis Potosí y en Guadalajara se implementó el sistema de fotomultas, los partidos en el poder perdieron las elecciones.

El comentario no está de más porque en el Distrito Federal, el gobierno de Miguel Ángel Mancera –y su nuevo reglamento de tránsito–, echaron a andar un programa de esta naturaleza.

Lo curioso es que, tal como ocurrió en San Luis y en Guadalajara, la oposición —en este caso, Morena—, ha hecho una campaña adelantada con la promesa de que echarán abajo el reglamento de tránsito y las fotomultas.

Por lo pronto, la bancada de Morena promovió un punto de acuerdo para que la autoridad capitalina evite cobrar las multas. Posteriormente, los morenistas juntan firmas para –según ellos– derogar el nuevo reglamento.

Es probable que los fieles a la iglesia de López Obrador no consigan su objetivo; es probable que no logren echar abajo el reglamento y es probable que esta faramalla se convierta en uno más de los espectáculos estériles del tabasqueño.

Sin embargo, en una ciudad con varios millones de automovilistas, en una ciudad en que pocos entienden cómo opera y en qué consiste el nuevo reglamento y en una ciudad en que la policía ha hecho su agosto con la impartición de multas… no sería extraño que la Morena se consolide como una alternativa viable y, en 2018, le coma el mandado al partido en el poder.