Al parecer al gobierno de Andrés Manuel López Obrador se le están saliendo las cosas de control –otra vez– pero ahora en el proceso del arranque de operación de la Guardia Nacional (GN) en los estados de la República Mexicana.
Y es que los elementos han manifestado su inconformidad por ser transferidos –sin su consentimiento– a la Guardia Nacional, a pesar de que el presidente había prometido, y reiteró esta mañana, que nadie será obligado a integrarse por la fuerza a dicho cuerpo de seguridad.
Sin embargo, policías federales manifiestan su rechazo a su incorporación a la Guardia Nacional y denuncian las pésimas condiciones en las que algunos elementos han comenzaron operaciones bajo el nuevo esquema de seguridad, el pasado domingo.
Muchos de los uniformados afirman que nunca se les avisó de su traslado a la Guardia Nacional, lo que implicaría, que no se les pague la operatividad sino hasta enero, pérdidas de bonos, días de descanso y pierdan toda la antigüedad acumulada como policía federal.
Además, denunciaron violación a sus derechos laborales, pues a quienes no acepten esas condiciones se les pedirá su liquidación.
Asimismo, elementos que ya pertenecen a la Guardia Nacional, han denunciado a través de vídeos y fotografías, las pésimas condiciones en las han trabajado en estos días.
Cuartos donde fueron evacuados, antes de ser enviados a la frontera sur en condiciones deplorables; camionetas en pésimo estado que recibieron para operar en el territorio nacional; y uniformes de tallas extra grandes que recibieron para integrarse al Instituto Nacional de Migración (INM).
Miembros de la #GuardiaNacional se lamentan de las camionetas que les entregaron para cumplir con su deber: “están viejas y parece que las pintaron con nuguet blanco”, dicen. pic.twitter.com/e3tUIjORG2
— GurúPolítico (@guruchuirer) July 1, 2019
