El descontento con la asignación de Rosario Piedra Ibarra como nueva presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) no sólo afectó a los legisladores opositores en la Cámara de Senadores, pues este jueves cuatro consejeras independientes decidieron abandonar a la institución por la “dudosa” elección de la activista.
“Es muy notoria la cuestionada elección de la nueva titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos… le resta legitimidad a la institución ideada para defender a la sociedad de los abusos de poder del Estado, cuyas principales herramientas para llevar a cabo su tarea son la pluralidad e independencia”, explicaron las expertas por medio de un comunicado.
Dicho escrito fue directamente enviado a la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández, quien el pasado martes, en medio de un zafarrancho, ratificó a la favorita del presidente Andrés Manuel López Obrador como líder de Derechos Humanos pese a las irregularidades presentadas en el proceso de votación y a la promesa de un nuevo ejercicio.
“Una ombudsperson carente de legitimidad será incapaz de establecer una interlocución válida con los distintos actores involucrados en la observación, protección y promoción de los derechos humanos; tampoco podrá generar la confianza ni certeza jurídica consustanciales a su misión… Una elección como la que la llevó al cargo… presagia el sometimiento abierto de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, a quienes actualmente detentan el poder político”.
Al final del comunicado, María Ampudia González, Angélica Cuéllar, Mariclaire Acosta Urquidi y María Olga Noriega Sáenz plasmaron sus firmas y anunciaron su renuncia por no respetar los principios de la institución.