Hace 77 años, los estadounidenses Bob Kane y Bill Finger escribieron la historia de Batman para la empresa DC Comics.
En dicha historia el protagonista es Bruce Wayne, un millonario que tras sufrir un severo trauma cuando era niño –al ver cómo un ladrón asesinaba a sus padres en un intento de asalto– promete vengarlos y combatir el crimen que acecha la vida en la ciudad de Gotham.
De este modo, el superhéroe se somete a un entrenamiento físico y mental para dotarse de habilidades de combate que le den ventaja sobre sus rivales.
La tarea no es sencilla, pues Gotham está llena de delincuentes y maleantes que tienen secuestrada la tranquilidad de los ciudadanos.
Resulta curioso cómo la historia de Bruce Wayne ha traspasado la pantalla en varias ocasiones, y no me refiero a que haya cientos de superhéroes combatiendo el crimen las calles de las ciudades, sino a que hay incontables casos de hijos que han visto morir a sus padres.
Apenas el pasado fin de semana, en la delegación Álvaro Obregón el hijo del cineasta León Serment de 22 años vio morir a su padre luego de ser víctimas de un asalto.
De acuerdo con la información, padre e hijo se alejaron 50 metros de su casa para acompañar a la esposa y madre a tomar un Uber, y una vez que ésta abordó el vehículo, ambos escucharon la célebre frase: “ya valió madres, esto es un asalto”.
Sin embargo, las víctimas no contaban con ninguna pertenencia de valor, por lo que los delincuentes los golpearon reiteradamente y a León Serment lo apuñalaron en ocho ocasiones, provocándole así la muerte.
En la historia de Batman, Bruce Wayne era apenas un niño cuando vio morir a sus dos padres y gracias a sus recursos pudo hacer justicia en su nombre y en nombre de todas las víctimas de Gotham.
En la vida real, como señalé antes, el panorama es mucho peor, pues ni con todos los recursos del mundo es sencillo hacer justicia en una ciudad donde la delincuencia es cosa de todos los días a todas horas.
Cabe recordar que en Gotham el crimen era un problema que imposibilitaba el desarrollo de una vida tranquila. Siempre se sabía de asaltos, asesinatos y todo tipo de hechos violentos que ponían en riesgo la vida de los ciudadanos.
Por eso… ¿Es válido preguntarnos si la Ciudad de México es equiparable a Gotham?
Y es que en la capital, como en la historia, las autoridades son incapaces de resolver el problema…
¿Necesitamos un superhéroe que nos salve de los delincuentes? ¿O eso es mucho pedir?
