El recién reelecto presidente de Venezuela, Nicolás Maduro inició una cacería en contra de los que no votaron este domingo y ordenó una serie de aprehensiones a castrenses, argumentando un supuesto complot en su contra.
Al menos 11 oficiales de Armada y la Aviación venezolana fueron detenidos esta semana. Las aprehensiones ocurrieron entre el 20 y 21 de mayo en medio de las elecciones en las que el presidente Nicolás Maduro logró la reelección para un período de seis años.
“Venezuela necesita diálogo, debate, encuentro, reencuentro, no insultos, no descalificaciones (…) Yo no actúo con base en el odio… actuamos con base en el amor, el amor a la patria, el amor de Dios, el amor al pueblo, el amor a nuestros hijos y nuestros nietos, el amor a una causa…”, prometía hace apenas 96 horas Nicolás Maduro, discurso que olvidó tras ser ungido presidente de Venezuela hasta 2025.
Alfredo Romero, director ejecutivo de la organización humanitaria local Foro Penal, fue quien informó acerca de las detenciones a los castrenses, y aseguró que otras 35 personas también fueron aprehendidas en las últimas 48 horas, todas por motivos políticos.
Entre enero y abril de 2018, 34 funcionarios de las Fuerzas Armadas fueron detenidos, según la directora ejecutiva de la organización no gubernamental Justicia Venezolana, Lilia Camejo.
De acuerdo con una serie de entrevistas que publicó hoy el diario La Razón, el gobierno de Maduro llamaba vía telefónica a la ciudadanía para confirmar que fueran a las urnas el pasado domingo.
Marlene Sifontes, del Frente Autónomo de Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato, aseguró al diario El Nacional que los castigos a los abstencionistas son previsibles, pues el día de los comicios hubo mucha presión para votar.
Y por si fuera poco, el régimen de Nicolás Maduro se lanzó una vez más contra la libertad de expresión, anulando los medios independientes que quedan el país caribeño.
Conatel, el ente regulador de la prensa en Venezuela, abrió este martes un procedimiento sancionatorio en contra de la página web de El Nacional, el único periódico independiente que quedaba, por supuestamente “incumplir con la Ley de Responsabilidad Social en Radio, Televisión y Medios Electrónicos”.
El gobierno acusa a la edición web del medio de “difundir mensajes que desconocen a las autoridades legítimamente constituidas e incitar y promover el odio”.
En medio de su discurso de amor y paz, muy parecido al de “ya sabes quién”, Nicolás Maduro se afianza en el poder con base en autoritarismo, persecuciones políticas, aprehensiones arbitrarias y quitando a su paso lo que sea necesario para mantenerse como el dictador que es.
