Este fin de semana, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, viajó a Michoacán y Nayarit para promover el aumento al salario mínimo.
Al reunirse con perredistas y con presidentes municipales, Mancera aseguró que estos encuentros—además de “promover el salario mínimo”—son para garantizar un futuro a los jóvenes, ya que de lo contrario, se unirán a las filas del crimen organizado.
Si bien para algunos las intenciones de Mancera por engrosar el bolsillo de las personas parecen ser buenas, también es cierto que para otros, el jefe de Gobierno está haciendo campaña rumbo a la elección presidencial de 2018.
Y mientras el PAN y el PRD analizan la opción de ir en alianza con un candidato común en 2018, los alcaldes panistas ya le dieron su respaldo a Mancera para apoyar el incremento al salario mínimo.
En una “Alianza por el Bienestar Social de México”, los presidentes municipales—tanto del PAN y del PRD—, le dieron su apoyo a Mancera, quien hasta ahora sigue sin afiliarse a ningún partido político.
Y para hacer más visible su propuesta del salario mínimo—o hacerse más visible él—, Mancera ampliará su gira al norte del país, empezando por Ciudad Juárez. Estas “acciones de campaña”, ya empezaron a ser criticadas por políticos y por la sociedad…pero cabría recordarles que Mancera apenas empieza, mientras que Andrés Manuel López Obrador lleva años haciendo giras al interior del país…y también prometiendo que incrementará el salario mínimo.
¿Por qué se le echan encima a Miguel Ángel Mancera, apenas que comienza? ¿Por qué no se le echan encima a López Obrador? ¿Por qué contra unos sí y contra otros no?
Así entonces, veremos a Mancera—en los próximos dos años— promoviendo el “Salario Digno para los Trabajadores de México”.
