Moches, casinos… los otros dineros del PAN

Ahora que el expanista Javier Lozano revivió el tema de “a qué” bolsillos fueron a parar los moches cobrados por diputados panistas para repartirlos a los municipios, tampoco se pueden olvidar otros dineros ilegales allegados al PAN, como los de los casinos de Monterrey.

Muchos de los participantes en los moches aparecen hoy en las listas de candidatos a las elecciones del próximo 1 de julio, empezando por el dirigente nacional del partido, Damián Zepeda, quien será senador sin tener que competir.

Zepeda era diputado cuando el alcalde panista de Celaya, Guanajuato, Ismael Pérez Ordaz, admitió su acuerdo con legisladores panistas para recibir una partida presupuestal de 160 millones de pesos en 2013, a cambio de una comisión de 35 por ciento y contratar a determinada constructora.

Fuentes panistas informaron entonces a Reforma que esa empresa estaba vinculada con el grupo político de Luis Alberto Villarreal, en su momento líder de los diputados panistas y mencionado como posible integrante de la lista para ir de nuevo a la Cámara de Diputados.

Según el alcalde Pérez Ordaz, a cambio de la aportación de 160 millones de pesos, recursos para obra pública del municipio, los diputados le exigieron que ésta fuera asignada a una constructora que definían los líderes panistas en el Congreso. Eso fueron los moches.

Otras vías de dineros allegados al PAN fueron las de los casinos de juego de donde salieron recursos, procedentes presuntamente del narcotráfico, para financiar sus campañas en Nuevo León, a través de los hermanos Juan José y Arturo Rojas Cardona.

El cónsul estadounidense en Monterrey, Bruce Williamson, informó en el despacho 09MONTERREY259 de Wikileaks, sobre la falta de transparencia de las autoridades panistas de Nuevo León y su “relación perniciosa” con el crimen organizado.

De acuerdo con agencias de inteligencia de Estados Unidos, los Rojas Cardona donaron ilegalmente 2.5 millones de dólares a la campaña de Adalberto Madero y Zeferino Salgado, así como a la del candidato del PAN a diputado federal por el distrito electoral de San Nicolás.

Tampoco hay que olvidar que Gustavo Madero hizo diputado al exalcalde de Monterrey, Fernando Larrazábal, cuyo hermano Manuel recibía 400 mil pesos de los casinos, cuando el narco quemó vivas a 52 personas en el Royale para presionar a los dueños a pagarle más.

Fue en aquel contexto en el que el cónsul Williamson alertó a su gobierno de que “los casinos son negocios rentables en efectivo y de uso frecuente para lavado de ganancias ilícitas. Nos aseguran que los hermanos Rojas Cardona tienen estrechos vínculos con el cártel de los Beltrán Leyva”.

Son dineros relacionados con panistas encumbrados hoy en el grupo dominante de ese partido.

Activos y jugando, pues.