De los 12 estados que elegirán gobernador el cinco de junio, el PRI ya eligió candidatos en siete entidades. Es decir, en Sinaloa, Aguascalientes, Tlaxcala, Veracruz, Durango, Zacatecas y Chihuahua.
Y según se sabe, en los cinco restantes, tres podrían tener conflictos importantes.
Dicen los enterados que las candidaturas en Hidalgo y Puebla saldrían sin mayor conflicto. No obstante, en el resto de las entidades –tres en total–, todo indica que la elección del candidato tricolor no será un día de campo. ¿Por qué?
Porque en Quintana Roo, el gobernador Roberto Borge insiste en promover a sus delfines —el diputado José Luis “Chanito” Toledo y el líder del PRI estatal, Raymundo King de la Rosa–; y por su parte, el CEN del PRI busca que el abanderado del Revolucionario Institucional sea el alcalde de Solidaridad, Mauricio Góngora. Al parecer, el “centro” y el gobierno estatal protagonizan una feroz batalla.
Porque en Tamaulipas, el jaloneo sería entre el gobierno federal y el CEN del PRI. Los primeros, en específico Luis Videgaray, secretario de Hacienda, promueven al diputado Alejandro Guevara Cobos; los segundos apuestan por Marco Bernal.
Y porque en Oaxaca, el engrudo está hecho bolas.
Por un lado, el ex gobernador José Murat promueve a su hijo, Alejandro Murat; quien hace semanas renunció a la dirección del INFONAVIT.
Pero, por el otro lado, un sector del priismo impulsa al empresario Gerardo Gutiérrez Candiani.
¿Y cuál es el problema?
Simple, de acuerdo con el periodista Carlos Ramírez, la insistencia de José Murat podría frustrar la candidatura de su hijo. Y es que el joven Murat se habría “movido” antes de la foto y lo habría hecho sin el favor presidencial.
Es decir, que la exigencia del padre habría llevado al hijo –Alejandro Murat– a violar uno de los principios básicos del priismo. En consecuencia, la candidatura se vendría abajo.
Pero la cosa no termina aquí.
El mismo Carlos Ramírez sostiene que atrás de la pre candidatura de Gerardo Gutiérrez Candiani estaría otro ex gobernador: el ahora panista Diódoro Carrasco.
Por cierto, no está de más comentar que Carrasco también empuja la alianza entre el PAN y el PRD en aquel estado.
