Olvidan promesa de “limpia” de mototaxis

A nueve meses del abatimiento de Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos, en la delegación Tláhuac, la promesa de retirar los mototaxis en dicha demarcación quedó en puras palabrerías.

La promesa del ex jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, no implicaba más que hacer cumplir la ley respecto a los mototaxis. El artículo 53 de la Ley de Movilidad actual prohíbe el transporte de pasajeros en motocicletas adaptadas y carros de golf.

Sin embargo, en un recorrido que hizo público este martes el diario El Universal, a su paso por las delegaciones Azcapotzalco, Gustavo A. Madero, Xochimilco, Iztapalapa, Coyoacán y, por supuesto, Tláhuac, continúa la presencia de ese tipo de transporte.

El escándalo de lo mototaxis llegó a su punto más álgido en julio del año pasado tras el abatimiento de El Ojos, cuando hubo extensión del operativo en contra del narcomenudeo en la delegación Tláhuac, en la que se víncula a dichos transportistas con la red de distribución de drogas.

Asimismo, en las investigaciones por parte de la PGJ capitalina, se supo que algunos mototaxistas –obligados por el Cártel de Tláhuac— fungían como “halcones” y más de 60 personas fueron desaparecidas por la banda criminal liderada por el extinto Felipe de Jesús Pérez Luna.

De acuerdo con las pesquisas, drogas, restaurantes, antros y chelerías no eran los únicos negocios de El Ojos. Poseía otro del que obtenía hasta medio millón de pesos semanales y que se convirtió en su emporio ilegal bajo el cobijo de Rigoberto Salgado, jefe delegacional con licencia morenista de Tláhuac.  Los mototaxis.

Desde hace seis casi seis años, cuando comenzó a crecer su control en Tláhuac, Xochimilco, Iztapalapa y el municipio de Chalco, Pérez Luna inició la compra de mototaxis, para usarlos en la venta de droga.

A pesar de que en su tiempo, Miguel Ángel Mancera aseguró que un cártel en la Ciudad de México era imposible, los hechos evidenciaron lo contrario. Incluso, al día de hoy continúan operando bajo la ilegalidad, pues “ahogado el niño, a tapar el pozo“.

Las promesas se las llevó el viento y a nueve meses del compromiso del retiro en su totalidad de este tipo de transporte en la capital del país, los operativos constantes mermaron poco después, aunado al sismo del 19 de septiembre, tal y como las investigaciones en contra de Rigoberto Salgado.

Miguel Ángel Mancera ya no está; Salgado inició campaña para lograr diputación por Morena, que le daría fuero constitucional; la ALDF nombró a José Ramón Amieva como jefe de Gobierno en CDMX. ¿Será este último quién lleve a cabo lo que corresponde en cuanto a los mototaxis?

Se vislumbra bastante difícil por los tiempos electorales, el poco lapso que permanecerá como mandatario capitalino y por los tantos pendientes que hay –entre otras cosas– en cuanto a reconstrucción tras el 19-S.