La Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha acusado que la policía y las autoridades en Nicaragua, han asesinado, encarcelado a personas sin someterlas a un juicio y cometido actos de tortura, por lo que hicieron un llamado para poner fin a la ola de violencia que desde abril pasado ya ha cobrado la vida de 280 personas.
“Se están cometiendo un amplio rango de violaciones a los derechos humanos, como ejecuciones sumarias, tortura, detenciones arbitrarias y se le está negando al pueblo el derecho a libertad de expresión”, aseguró el portavoz de la ONU Rupert Colville.
Aseguró que los actos de represión cometidos, son realizados por el propio gobierno o por elementos armados que parecen estar trabajando en coordinación con ellos, mientras que, los manifestantes, eran en su mayoría pacíficos, aunque algunos sí se encontraban armados.
Por su parte, el presidente Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo, vicepresidenta del país, han asegurado que no existen violaciones a los derechos humanos, puesto que entre los fallecidos también se encuentran miembros de la fuerza pública.
“Estamos recuperando la seguridad, la paz, las posibilidades para el trabajo y la vida en nuestra Nicaragua (…) Hemos estado llenos de desgracia, producida por una minoría llena de odio (…) Volverá la sonrisa a iluminar los rostros de todas las familias nicaragüenses”, aseguró Rosario Murillo.
Hay que recordar que el plan de reducir los beneficios a los pensionados, impulsado por Ortega, provocó una ola de movilizaciones en el mes de abril, generando un mayor rechazo a la gestión del mandatario.
Sin embargo, la ola de protestas y violencia fue subiendo de tono. Tan sólo hace unos días, pobladores de la comunidad indígena de Monimbó en la ciudad de Masaya, a unos 30 kilómetros al sur de la capital, denunciaron un estado de sitio por parte de hombres armados, supuestamente pertenecientes a las “juventudes sandinistas”.
“Nos están atacando desde las 06.00 de la mañana, nos tienen rodeados, el pueblo está resistiendo lo más que puede (pero) necesitamos ayuda”, aseguraba un joven.
Asimismo, el pasado fin de semana, estudiantes de la universidad UNAN-Managua, Nicaragua, fueron reprimidos con fuerzas paramilitares, luego de que los jóvenes tomarán las instalaciones universitarias como medida de protesta ante las represalias que el gobierno de Daniel Ortega, ha tomado en contra de la ciudadanía que ha manifestado en contra suya.
