Un juez federal de la Ciudad de México otorgó la libertad al exgobernador de Sonora, Guillermo Padrés, en la acusación de defraudación fiscal. Para salir de prisión deberá garantizar una garantía de 100 millones de pesos.
Sin embargo, a pesar de que es la primera vez que obtiene este beneficio en casi dos años de estar preso, el exmandatario no abandonará el Reclusorio Oriente porque aún no le conceden el cambio de medida cautelar en el otro proceso pendiente por lavado de dinero.
Una vez que Padrés pague su garantía, de incumplir algunas de las medidas impuestas ordenará su reaprehensión y le impondrá la prisión preventiva de nueva cuenta.
Por otro lado y por si fuera poco, el exgobernador también se libró de la expulsión del PAN o de cualquier sanción partidista, según resolvió la Comisión Anticorrupción del partido, que preside Luis Felipe Bravo Mena.
Ello ante los procesos de expulsión apresurados del PAN en contra 69 militantes que habrían apoyado otras campañas en el pasado proceso electoral.
Mena argumentó que en el último año, Padrés Elías no refrendó su militancia panista, por lo que la citada comisión se declaró incompetente para promover alguna sanción política en contra del exgobernador de Sonora.
En contraste, el Comité Directivo Estatal (CDE) del PAN en la Ciudad de México expulsó ayer a 17 militantes, entre ellos a algunos que ya habían renunciado a su militancia, como Rafael Guarneros, quien el 16 de mayo pasado dejó el PAN.
Este jueves, el PAN de la capital del país informó que iniciaba “el proceso de expulsión a 69 militantes que participaron en la elección pasada como representantes generales y de casilla de otras fuerzas.
