Pepenadores de “cascajo político"

El cascajo –como saben–, es el desperdicio de obras en construcción o de aquellas que están en demolición. Es, por decirlo de manera coloquial, la basura de la construcción.

Pero resulta que en política –en la construcción de partidos, proyectos ideológicos o de gobierno–, también suele haber desperdicio, basura o –como en la industria de la construcción–, “cascajo político”.

Así, por ejemplo, en tiempos electorales no son pocos los partidos políticos que suelen hurgar en la basura de adversarios partidistas para rescatar y/o “pepenar” el “cascajo político”.

Lo simpático es que los pepenadores de la basura política poco importa si sacan de los desperdicios a verdaderos adefesios, políticos impresentables, pillos sin vergüenza alguna o verdaderos innombrables. Lo que importa es reciclar la basura político electoral para venderla a los electores como un producto nuevo.

Y el mejor ejemplo del cascajo político es AMLO, a quien el PRI colocó en el bote de basura y lo recicló el PRD de Cuauhtémoc Cárdenas. La historia la conocen todos. López traicionó a Cárdenas, usó y abusó del PRD y luego lo traicionó, para más tarde crear Morena.

Pero conocedor de la “mina de oro” que es la basura política –ya que él mismo es producto de los basureros de la política–, el dueño de Morena se ha convertido en el “Rey del Cascajo Político”. Sin pudor alguno pregona que los corruptos del PRI, PAN y PRD que pasan a Morena, se purifican por el sólo hecho de entrar a esa “lavadora de cascajo” en que se convirtió Morena.

Pero si queremos ser rigurosos, lo cierto es que la Morena de AMLO no es el único partido que recicla cascajo. No, a ese negocio engañabobos –ya que los partidos venden gato por liebre a los electores–, también le entran con peculiar alegría el PRD y el PAN. ¿Tienen dudas?

Según un recuento periodístico, nueve de los candidatos de partidos opositores a la renovación de 12 gobiernos estatales ya fueron derrotados en las urnas. Por ejemplo, de los 12 candidatos que presentó el PAN a igual número de gobiernos estatales, seis ya habían sido derrotados y por lo menos tres son reciclados.

Uno. José Rosas Aispuro, ex priísta de Durango, derrotado en 2010 por el actual gobernador priista, Jorge Herrera Caldera. Dos. Miguel Ángel Yunes ex priísta de Veracruz, derrotado en 2010 por Javier Duarte. Tres. Martín Orozco, en Aguascalientes, derrotado en 2010 por el gobernador Carlos Lozano de la Torre. Cuatro. Javier Corral en Chihuahua, derrotado en 2004 por el ex gobernador José Reyes Baeza. Cinco. Adriana Dávila en Tlaxcala. Derrotada en 2010 por el gobernador Mariano González Zarur. Y seis, Francisco Xavier Berganza, de Hidalgo, eterno perdedor de todos los partidos.

Pero no es todo. Morena postuló a dos derrotados y reciclados: Uno. David Monreal en Zacatecas, el perredista, ex petista y derrotado en 2010. Y dos, Nora Ruvalcaba, en Aguascalientes. También derrotada en 2010. Y para rematar, el PRD postularía al ex priísta José Guadarrama Márquez, en Hidalgo, quien fue derrotado por Miguel Osorio, en 2005.

Como queda claro, tanto el PAN, como el PRD y Morena no crean cuadros propios sino que reciclan el cascajo del PRI. Más aún, en no pocos de los 12 estados, PAN y PRD hacen todo para que gane el PRI.

AL TIEMPO.

Y a propósito de traiciones. Dicen los que saben que el gobernador de Tamaulipas. Egidio Torre, traicionó al PRI y que ahora juega con el candidato del PAN, Francisco García Cabeza de Vaca. Y dicen que festejaron el acuerdo en conocido comedero de Polanco. ¿Será?

Tomado de Milenio