Este miércoles la jueza, Gabriela Hardt, sentenció al ex presidente, Lula da Silva a 12 años y 11 meses de prisión, ésta es la segunda condena que recibe por el caso de fraude conocido como Lava Jato.
Cabe mencionar, que el también tornero se encuentra en prisión desde el pasado 7 de abril de 2018, cuando fue vinculado a los sobornos millonarios que la paraestatal Petrobras le transfirió al Partido del Trabajo, mismo que lo llevó a la presidencia de Brasil.
La nueva investigación, que le dictó esta segunda sentencia, se desprende de la construcción de una casa de campo, que costó casi un millón de reales, y de la cual se benefició el Lula y las empresas Odebrecht, OAS y Schain.
De acuerdo con la jueza, el inmueble estaba a nombre de Fernando Bittar, empresario y allegado del condenado, y en 2010 se la prestó para que descansará en ella.
“Lula da Silva recibió una ventaja indebida como consecuencia del cargo como presidente de la República, de quien se espera un comportamiento ejemplar”, expuso Gabriela Hardt.
