Dicen los peritos del GIEI que dejan el caso Iguala porque la PGR no cumplió con los acuerdos.
No obstante, una semana antes, la secretaría de Gobernación anunció que daba por terminada la relación con los expertos enviados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
En pocas palabras, los peritos dicen que renuncian cuando en realidad los echaron.
El asunto no es menor porque el accidentado final de la colaboración del GIEI tiene el mismo tono que el resto del trabajo que desempeñaron los peritos en México.
Es decir, que los peritos se van como llegaron; en medio de engaños y verdades a medias.
Aun así, dicen los enterados, que la presencia del GIEI podría ser positiva.
En entrevista para La Otra Opinión, el Doctor Juan Miguel Alcántara Soria –extitular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública–, cuestionó que los peritos extranjeros se muestren incómodos ante las revelaciones de la PGR. Según Alcántara, si el tercer peritaje da la razón al trabajo de la Procuraduría, es simplemente lógico que el gobierno federal difunda los hallazgos.
Por eso, para el Doctor Juan Miguel Alcántara tiene poco sentido que los peritos decidan terminar su relación con la PGR a causa de estas revelaciones.
Eso sí, para Alcántara, valió la pena invertir en los peritos, valió la pena que los peritos vinieran al país y valió la pena que los peritos extranjeros pusieran en duda el trabajo de la PGR. ¿Por qué?
Porque para Alcántara, el trabajo de los peritos abona a la credibilidad de la investigación de la PGR. Y porque, según Alcántara, cuando todas las investigaciones concluyan; las dudas planteadas por el GIEI servirán para consolidar las conclusiones de la PGR. ¿Será?
