La administración del presidente estadounidense, Donald Trump, efectuó un plan para detener a migrantes que soliciten asilo entre la frontera sur del país para que permanezcan más tiempo hasta que sean procesados sus casos para entrar al país del norte.
“El plan, llamado ‘Quédense en México’, representa un rompimiento mayor con los procedimientos de inspección vigentes, que generalmente permiten permanecer en Estados Unidos y evitar la deportación a aquellos que establecen un miedo de regresar a sus países de origen”, afirmó el diario The Washington Post.
Hasta el momento los solicitantes de asilo pueden permanecer en Estados Unidos hasta que se realice una audiencia con un juez migratorio. Este sistema que lleva por nombre “Detención y Liberación”, no le agrada nada al presidente Trump. La Casa Blanca se encargará, con este plan, de romper con el actual procedimiento.
De acuerdo a fuentes cercanas del gobierno próximo, la estrategia ya ha sido consultada con el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quien podría aceptar que este plan se lleve a cabo.
