¿Quién dice que hay pobreza en México?

Los datos, las cifras y los indicadores de medición de la pobreza, la calidad de la educación, la salud, la alimentación, la vivienda y la seguridad social sirven para pintar un panorama detallado de la situación que vive el país en general. Indican cuáles son sus principales problemas, si ha habido avances o retrocesos y en qué medida.

Sin embargo, dichas cifras, datos e indicadores también suelen emplearse como instrumentos de la política que sirven –por lo general, y según sea el caso de quien los interpreta– para ensalzar los logros del gobierno o criticar su incapacidad. La batalla no sólo se libra en el terreno de la interpretación; también se desarrolla en el mismísimo campo de la generación de los datos.

Este viernes el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) publicó el Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) 2015. De acuerdo con el Instituto, la “compleja tarea de medir los ingresos” de la población mexicana exigió la realización de nuevas acciones instrumentales para la captación de dicha estadística.

Entre otras razones, el INEGI argumentó que  las personas encuestadas tienden a declarar en las encuestas menos de lo que realmente perciben. En síntesis, se cambió la forma de medir la pobreza porque –de acuerdo con el instituto– la población mexicana miente.

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo social (CONEVAL), no tardó en reaccionar. En un comunicado de prensa acusó la falta de transparencia en el proceso de modificación para captar las variables económicas y sociales.

Cabe destacar que el CONEVAL es el organismo encargado de medir la pobreza a nivel nacional, estatal y municipal, y mantiene un convenio con el INEGI para que éste le proporcione las estadísticas necesarias para elaborar el diagnóstico de la situación económica del país.

El CONEVAL afirmó que los datos que presenta el informe del INEGI –como un aumento de 11.9 por ciento en el ingreso corriente de los hogares mexicanos– son incongruentes con la tendencia que se había presentado en instrumentos anteriores.

¿Cuál es la importancia de la modificación en los criterios de medición de la pobreza? En primer lugar, que –como lo indicó el CONEVAL– provocará una gran variación en las estadísticas de un problema por el que –en años anteriores– se ha criticado a la administración Peña Nieto: la ineficacia de sus programas de desarrollo social. En segundo lugar, el cambio en los criterios de medición impedirá hacer un contraste objetivo entre las cifras de este año y las del año pasado, lo cual hará imposible saber cuál ha sido el avance o el retroceso real de un periodo a otro. Por último, esta información impacta en el diseño de políticas: o todas las políticas públicas elaboradas antes de esta modificación estaban basadas en información incorrecta, o así lo estarán las que se diseñen de hoy en adelante.

Entonces, ¿hay o no pobreza en México? El problema es que la respuesta depende de quién lo diga y qué objetivo persigue al decirlo.