La secretaría de Educación Pública anunció que dará de baja a 291 maestros de todo el país por no participar en la evaluación diagnóstica realizada entre el 22 de agosto al 3 de octubre.
De acuerdo con un comunicado de la secretaría, menos del 1 por ciento del total de docentes que fueron convocados a realizar la prueba no participaron en el proceso.
A su vez, Aurelio Nuño, secretario de Educación Pública, confió en que en noviembre, cuando se realizará la evaluación de desempeño, se tengan los mismos niveles de “participación y entusiasmo”.
Según Nuño, el objetivo de las pruebas no es traer problemas, sino beneficios y que aquellos que reprueben no serán cesados de su cargo, pero los que falten sí.
Por su parte, el gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, afirmó que a los maestros guerrerenses que marcharon el pasado lunes, y no asistieron a dar clase, no se les descontará nada de sus sueldos debido a que fue una manifestación pacífica.
Añadió que se debe ser tolerante y es importante llegar a acuerdos con los docentes para mantener la armonía.
No está de más recordar que el propio Aurelio Nuño argumentó que aunque los docentes tienen derecho a manifestarse, no es posible suspender clases y faltar a los derechos de los niños, que están por encima de cualquier otro derecho. Por lo tanto, si no se aplican los descuentos, habrá sanciones.
En entrevista para La Otra Opinión, el Maestro Francisco Landero –presidente del Consejo Consultivo de Suma por la Educación– consideró un triunfo para los niños y los padres de familia que no se interrumpan clases.
A su vez, explicó que el gobierno simplemente hizo lo que tenía que hacer: aplicar la ley.
Mientras que, los grandes perdedores serían los afiliados a la CNTE pues en sus movilizaciones cada vez son menos los que participan.
En opinión de Landero, al gobierno federal le hizo falta decisión y voluntad. Finalmente, se decidió aplicar la ley y seguir la línea que aprueban y quieren la mayoría de los mexicanos.
En este contexto, el Maestro Landero señaló que en los paros más recientes, las inasistencias de los profesores son menos que las esperadas. En Oaxaca, el día del paro, faltaron poco menos de 54 mil maestros, en Michoacán arriba de 16 mil y en Chiapas sólo 4 mil.
Para el experto, estas cifras y el trabajo de investigación que han venido realizando, deja ver que –como dijimos en este espacio hasta el cansancio–, la CNTE obligaba a sus agremiados a marchar. O si lo prefiere, que buena parte de los manifestantes eran maestros secuestrados por la mafia sindical de la Coordinadora, ¿no que no?
