El secretario de gobernación, Alfonso Navarrete Prida, indicó que desconocía el contexto de las declaraciones del Obispo de Chilpancingo, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, dado que el estado mexicano no negocia la aplicación de la ley.
“Con relación al tema del Obispo de Chilpancingo, vi declaraciones en medios, no conozco el contexto. Desde luego se ha estado en contacto con la conferencia del Episcopado Mexicano y con el Arzobispo Primado de México. Habrá cuál es el contexto en el cual refiere estas declaraciones. Lo que es un hecho es que el gobierno mexicano no negocia la aplicación de la ley y no hay posibilidad alguna de que eso ocurra” acotó el secretario.
En el marco de la inauguración de la Sala “Jorge Carpizo” en el Museo de las constituciones, Navarrete Prida, indicó que se tiene conocimiento del grupo criminal que tiene presencia en las zona, donde llevan más de 45 días de dejar sin electricidad y agua potable en la comunidad de Pueblo Viejo, municipio de Tlacotepec.
El secretario reconoció el grave problema de inseguridad en la zona y en el estado en general; pero se mantiene firme en la aplicación de la ley para detener a los responsables de la violencia en la zona.
Por último, Navarrete se pronunció por garantizar la gobernabilidad en la entidad, no importa si es un ente público, privado o religioso, acotó de la siguiente manera:
“No es un tema de dubitativo, las leyes se acatan y se cumplen. Si tenemos un problema en Guerrero, sí ha habido temas confabulándose en materia de seguridad, sí ha habido ejecuciones en una zona cercana a Chilpancingo, que es Chilapa. Sí tenemos obligación de entrar a estos lugares y aplicar la ley, no el uso desmedido de la fuerza, sino poner a disposición del juez a quien la haya infringido”
