Tres casos que abandonan lista negra de impunidad ¿aplaudimos?

 

El pasado jueves la Policía Federal capturó a uno de los presuntos secuestradores y asesinos de la española María Villar Galaz, quien desapareció el 13 de septiembre en Santa Fe y fue encontrada muerta a los pocos días en el Estado de México.

Por otra parte, el caso de la joven Karen Esquivel, que desapareció el 22 de septiembre en Lomas Verdes y que seis días después fue asesinada y puesta dentro de una maleta, es otro expediente que el gobierno del Estado de México mantiene  abierto.

Al respecto, el procurador del Estado de México, Alejandro Gómez, dijo que de acuerdo con las investigaciones, quien secuestró y asesinó a la joven fue un franelero con quien ella había tenido un altercado.

Otro caso que cobró relevancia fue el del cineasta León Serment, quien supuestamente había muerto durante un asalto, y posteriormente su esposa y viuda Adriana Rosique habría decidido quitarse la vida a causa del dolor.

Sin embargo, este viernes la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México informó que en ambos casos los autores intelectuales fueron el hijo de León Serment y su novia, quienes pagaron a dos hombres 100 mil pesos para cometer el delito.

Por los casos anteriores que poco a poco han sido resueltos por la autoridad, vale la pena reconocer los esfuerzos para encontrar a los responsables.

De este modo los crímenes no quedan en la impunidad, como tantos otros. No obstante, hay que reprochar que la policía únicamente actúa cuando el caso cobra relevancia no sólo en el país, sino en el mundo.

Hay millones de expedientes sin resolver que por no haber aparecido en primeras planas, seguirán en el mismo estatus indefinido.