¿Tú le crees a AMLO?: yo también

Aun cuando el instituto electoral mexicano ha sido readecuado (y hasta cambiado su nombre) según sus exigencias en 2006 y 2012, AMLO vuelve a desconocer a las autoridades electorales.

“El INE y el TRIFE no inspiran confianza. Por eso nos estamos preparando al 100 para la defensa del voto. Después de esta elección habrá, es nuestro compromiso, una auténtica democracia y ya no habrá fraude electoral en ninguna de sus modalidades”, tuiteó el sábado.

Eso de “auténtica democracia” es exactamente lo mismo que anunciaron Fidel Castro y Hugo Chávez: el sucesor de Fidel continúa en el poder 60 años después, y sin hacer elecciones; mientras el sucesor de Chávez continúa en el poder 20 años después, y en abril hará elecciones… sin opositores.

Ésa es la “auténtica democracia” de AMLO. Sin embargo, hay que concederle que nunca ha mentido. Si gana, AMLO se perpetuará en el poder y lo primero que hará será cambiar nuestra actual Constitución “burguesa” y gobernar a mano alzada desde el Zócalo.

Por lo pronto, anunció que si es Presidente ordenará a sus seguidores filósofos, antropólogos, especialistas, escritores, poetas, activistas, indígenas y líderes religiosos que le elaboren una Constitución moral.

Y el 7 de febrero de 2017, en entrevista con León Krauze para Univisión, elogió la democracia implantada por Hugo Chávez tras su triunfo electoral en 1998, con una campaña basada en la lucha contra la corrupción… corrupción que no sólo no acabó en Venezuela, sino que aumentó.

Repasemos aquella entrevista:

—Hugo Chávez fue electo con una democracia mucho más vigilada o con elecciones más vigiladas que las nuestras.

—¿Mejor aquella democracia que la nuestra?

—Sí, en lo electoral, sin duda. Aquí nos han robado la Presidencia.

Es esa la suprema aspiración de AMLO: establecer la democracia chavista, que es mejor que la nuestra “en lo electoral”. ¿Hay que recordar que lo primero que hizo Chávez fue cambiar la Constitución para reelegirse de por vida, y que su sucesor hizo otra para eliminar las elecciones libres?

AMLO nunca ha engañado en eso: su Proyecto Alternativo de Nación, en el lineamiento No. 9, advierte que “se establecerá una auténtica democracia. Nunca, nada ni nadie, estará por encima de la voluntad soberana del pueblo”.

Qué casualidad, la Constitución de Cuba plantea eso mismo: “La soberanía reside en el pueblo, del cual dimana todo el poder del Estado”. ¿Hay que recordar que en Cuba no hay elecciones libres, ni libertad de expresión, de empresa, de movimiento…?

En fin, hay que decir que eso de AMLO de “auténtica democracia”, y de desconocer a las autoridades electorales es el anuncio de que “después de mí, nadie ganará jamás otra elección en México”.

Como en sus idílicas Cuba y Venezuela.