Este lunes el presidente, Andrés Manuel López Obrador, está de visita en su estado natal, Tabasco, pero trabajadores de Pemex y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) lo recibieron con protestas por haber sido despedidos injustificadamente al comienzo de su administración.
Fueron los antiguos empleados de la paraestatal los que le solicitaron al político tabasqueño que para la construcción de la refinería de Dos Bocas, se contrate a puros ciudadanos tabasqueños.
Mientras que los ex trabajadores del ISSSTE pidieron que se les paguen los salarios que quedan pendientes, que van de ocho a seis quincenas atrasadas.
Días difíciles para AMLO, el sábado pasado fue abucheado en un estadio de béisbol y ahora, en su tierra, le recriminaron sus decisiones.
